Autoridades de Salud de Alaska informaron 361 casos de sífilis en 2020, lo que representa un aumento del 49% con respecto a 2019 (242).
De estos, 306 (85%) casos se encontraban en las etapas primaria, secundaria o latente temprana, y 47 (13%) casos estaban en la etapa latente tardía o de duración desconocida.
El 55% por ciento de los casos fueron hombres, mientras que el 45% fueron mujeres. Seis de cada 10 de los casos masculinos fueron en hombres que se identificaron a sí mismos como hombres que tienen sexo con mujeres.
Ocho casos se clasificaron como sífilis congénita. Los ocho bebés identificados con sífilis congénita fueron entregados a madres que informaron atención prenatal inconsistente o nula y fueron tratados por sífilis <30 días antes del parto de su bebé. Seis (75%) de los bebés demostraron dos o más indicadores / síntomas compatibles con la infección por sífilis.
El brote de sífilis en Alaska se declaró por primera vez a principios de 2018 y desde entonces el recuento de casos aumenta cada año. Los casos de sífilis congénita están en un nivel récord.
Detrás de este aumento estarían el aumento de la casos en hombres y mujeres heterosexuales, más casos en personas que informaron el uso de drogas ilícitas (un factor de riesgo para la adquisición de sífilis) y la falta de atención prenatal.
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