Desde el 1 de enero de 2018 hasta el 31 de mayo de 2021, las provincias de N’Djamena, Borkou y Tibesti en Chad, han notificado un total de 122 casos de leishmaniosis visceral. De los 122 casos, 2 (4,0%) han muerto, mientras que 98 (80,0%) se han recuperado. Los casos identificados en N’Djamena provienen de Miski y todos fueron autoreferidos. Los distritos sanitarios que reportan el mayor número de casos son Bardai, con 61 casos, que representó 50,0% de los casos notificados, seguido de Zouar (30 casos; 25,0%), Faya (1 caso, 1,0%); en 20 casos (16,4%) se desconoce el área de origen.
La mayoría de los casos (60; 71,0%) se han notificado en el grupo de edad de menores de 5 años, seguido de los de 16 años o más (23; 19,0%). Se han visto afectados más hombres (60%) que mujeres (40%).
Chad había notificado casos esporádicos de leishmaniosis desde 2018. En agosto de 2020, las autoridades sanitarias recibieron rumores de una enfermedad febril entre jóvenes mineros de oro en las provincias de Tibesti y Borkou (regiones desérticas del norte). En consecuencia, se envió un equipo de investigación a las áreas afectadas e identificó un total de 68 casos sospechosos con dos muertes en los registros de salud y expedientes médicos.
Siguiendo las recomendaciones de esta misión, y con el apoyo técnico de socios clave, se enviaron 19 muestras de sangre al Laboratorio de Investigación y Referencia de Parasitología (Instituto de Salud Carlos III) en Madrid, España, para la confirmación e identificación de la especie. El análisis de estas muestras encontró 16 casos positivos mediante pruebas de diagnóstico rápido, y 13 casos positivos por reacción en cadena de la polimerasa (PCR). Se identificó Leishmania donovani durante el análisis preliminar.
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