La actinomicosis es una infección anaerobia crónica localizada o diseminada por vía hematógena causada por el Actinomyces israelii y otras especies de Actinomyces. Los hallazgos consisten en un absceso localizado con múltiples fístulas de drenaje, una neumonitis semejante a la provocada por tuberculosis y una leve septicemia.
El diagnóstico se basa en el aspecto típico del paciente y en la identificación del microorganismo con pruebas de laboratorio. El tratamiento consiste en la administración de antibióticos durante un período prolongado y cirugía.