La fiebre hemorrágica boliviana es más común entre abril y julio en la región de la sabana superior de Beni. La exposición principal ocurre a través de roedores (Calomys callosus) que entran en los hogares en áreas endémicas.
La BHF es una de las enfermedades de los fenavirus humanos notificadas en América: fiebre hemorrágica argentina (virus Junin), fiebre hemorrágica brasileña (virus Sabia), coriomeningitis linfocítica, fiebre hemorrágica venezolana (virus Guanarito) e infección por el virus Whitewater Arroyo.
En África han notificado al menos dos enfermedades relacionadas: la fiebre de Lassa y la infección por el virus Lujo.
La infección en Calomys callosus es asintomática con la presencia del virus en la saliva, la orina y las heces del roedor. El 50% de los C. callosus infectados experimentalmente presentan viremias de forma crónica y eliminan el virus en sus excreciones o secreciones corporales.
El roedor adquiere el virus tras el nacimiento y comienza a expulsarlo a través de la orina y la saliva mientras succiona. Cuando los ratones adquieren el virus de adultos, pueden desarrollar inmunidad y la capacidad de no eliminar el virus.
Aunque se desconoce la dosis infecciosa del virus Machupo en humanos, las personas expuestas pueden infectarse al inhalar el virus en las secreciones o excreciones en aerosol de roedores infectados, al ingerir alimentos contaminados con excrementos de roedores o por contacto directo de los excrementos con la piel desgastada o membranas mucosas orofaríngeas.
Se ha documentado la diseminación nosocomial y de humano a humano. El contacto hospitalario con un paciente enfermo puede propagar el virus Machupo de persona a persona.
En 1994, una infección secundaria fatal de seis miembros de la familia en Magdalena, Bolivia, por una sola infección adquirida naturalmente, sugirió aún más el potencial de transmisión de persona a persona.
Entre diciembre de 2003 y enero de 2004, se notificó un pequeño foco de fiebre hemorrágica en el área de Cochabamba. Un segundo Arenavirus, el virus del Chapare, fue recuperado de un paciente con infección fatal.
Clínica (Sintomatología)
Las manifestaciones clínicas tempranas consisten en signos y síntomas inespecíficos que incluyen fiebre, dolor de cabeza, fatiga, mialgia y artralgia. En un plazo de siete días, los pacientes pueden desarrollar signos hemorrágicos, como sangrado de la mucosa oral y nasal y de los tractos broncopulmonar, gastrointestinal y genitourinario. Las tasas de letalidad oscilan entre el 5% y el 30%.
Tratamiento
La ribavirina se ha utilizado con éxito en varios casos de BHF. El régimen recomendado para adultos es: 2.0 g IV, seguido de 1.0 g IV Q6h X 4 días, y luego 0.5 g Q8h X 6 días
El agente etiológico y las características clínicas de la BHF son similares a los de la fiebre hemorrágica argentina (HCA). Los signos neurológicos son más comunes en la insuficiencia cardíaca aguda, mientras que las diátesis hemorrágicas son más comunes en la insuficiencia cardíaca aguda.
Prevención
Una vacuna disponible para AHF también podría ser teóricamente efectiva contra BHF. Debido a su patogenidad, el virus Machupo requiere Bioseguridad Nivel Cuatro
Referencias