La Casa de Saud dio lugar al primer Estado saudí, el Emirato de Diriyah, que más tarde se derrumbó en la guerra otomana-wahhabi entre 1811 y 1818 y el segundo Estado saudí, el Emirato de Nechd, que duró de 1824 a 1891. La monarquía moderna fue fundada por Abdelaziz bin Saud, quién realizó unas conquistas que iniciaron la unificación en 1902 con la toma de Riad, actual capital del país. El Estado saudí moderno comenzó en 1932 y el gobierno ha sido una monarquía absoluta y una teocracia desde sus comienzos, basada en una aplicación extremista de los principios del islam. Hoy en día representa una de las últimas seis monarquías absolutas del mundo. Se ha llamado al movimiento religioso wahhabismo, dentro del sunismo, «el rasgo predominante de la cultura saudí». El reino en su política interior sigue estrictamente los preceptos islámicos, con una de las más rigurosas interpretaciones de la sharia.