En 2017 hubo 219 millones de casos de malaria en el mundo. Según el informe mundial sobre la malaria 2018, la reducción en el número de enfermos en el mundo se ha estancado tras varios años de disminución (239 millones en 2010 – 214 millones en 2015)
En 2017, cerca del 70 por ciento de los casos y de las defunciones por esta enfermedad se concentraron en 11 países: 10 países africanos (Burkina Faso, Camerún, Ghana, Malí, Mozambique, Níger, Nigeria, República Democrática del Congo, República Unida de Tanzania y Uganda) y la India. Se registraron 3,5 millones de casos más en esos 10 países que en el año anterior, mientras que en la India se redujo la carga de morbilidad.
El informe pone de relieve grandes lagunas en la cobertura en la distribución y en el uso de mosquiteros tratados con insecticida. Se estima que la mitad de los africanos expuestos al riesgo de contraer la malaria no dormían bajo una mosquitera tratada.
El número de países que están cerca de eliminar la enfermedad continúa aumentando, de 37 en el año 2010 a 46 en 2017. En China y El Salvador, donde hacía tiempo que la enfermedad era endémica, no hubo transmisión local en 2017
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